¿Qué aprenden los niños de nuestros errores?

Los padres aprendemos, experimentamos y cometemos errores todo el tiempo.  Es utópico creer que el mejor ejemplo de vida para nuestros hijos significa ser personas organizadas, calmadas, con buen sentido del humor, no gritar jamás, no enfadarse, tener las palabras correctas.  No hay padre perfecto, ni padre que pueda mantener siempre la calma, mucho menos si tienes un niño con TDAH.

Cuando tengas momentos de imperfección,  equivocándote,  aprovéchalos para demostrar a tu hijo la manera de reparar y  el aprendizaje que se obtiene.

Acepta que te equivocaste,  y que los errores son parte de la vida en todas las edades, en todas las circunstancias, y que es la manera en la que realmente podremos mejorar.

Cuando debido a nuestra emociones fuertes levantamos la voz y decimos cosas que hieren, repara diciendo: “Hijo, discúlpame, no debí hablarte en ese tono, ni decirte que eres mentiroso, estaba muy enfadada, no es la forma de resolver el problema, deja que me calme y lo conversamos”.

Enseñando a nuestros hijos cómo gestionar nuestros errores, los estamos ayudando a tener éxito en la vida.

Malena Huamán